La violencia contra niñas y mujeres es una de las agresiones más graves a los derechos humanos. Está naturalizada a estructuras sociales donde el género, la edad, costumbres y condiciones económicas, dan como resultando agresiones físicas y psicológicas.
Naciones Unidas define la violencia contra las mujeres como “todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”. (Resolución de la Asamblea General Resolución 48/104 Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer, 1993)
Si le sumamos a esto la vulnerabilidad de ser una niña menor de edad nos encontramos con espacios considerados peligrosos como: el hogar, la escuela, el colegio y espacios públicos. Según GK medio de comunicación digital en Ecuador por cada 10 delitos de abuso sexual, 8 son en contra de niñas.
La sociedad ecuatoriana tiene una mirada esquiva frente a esta situación, según estudio de ONU Mujeres del 2018, 8 de cada 10 ecuatorianos toleran la violencia contra las mujeres y no la denuncia ni ayudan a las víctimas si lo presencian.
Los efectos que pueden tener la violencia contra las niñas están presentes en la salud física y mental de una mujer adulta. En ocasiones esto puede resultar en problemas dentro de habilidades sociales, con trastornos emocionales y cognitivos que pueden tener como respuesta a un estado de salud comprometido, con problemas en su sistema inmunológico.
El derecho de las mujeres a vivir sin violencia está consagrado en los acuerdos internacionales como la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW), en especial a través de sus recomendaciones generales núm. 12 y 19 y de la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer de las Naciones Unidas.
La legislación de todos los países debe garantizar el derecho a no sufrir cualquier tipo de discriminación ni acto violento por ninguna razón. El art. 46 de la Constitución del Ecuador señala: “Protección y atención contra todo tipo de violencia, maltrato, explotación sexual o de cualquier otra índole, o contra la negligencia que provoque tales situaciones” Además, algunas organizaciones internacionales se encargan de que los diferentes países cumplan con el art.19 de la Convención sobre los Derechos del Niño, buscando los instrumentos necesarios para garantizar su seguridad. De esta forma es importante conocer propuestas que pretenden frenar la violencia infantil.
2. PROPUESTA INSPIRE (Estrategias para frenar la violencia)
Actualmente muchas organizaciones internacionales como ONU Mujeres y la Organización Mundial de la Salud, han realizado propuestas interesantes para luchar contra esta realidad. La propuesta denominada INSPIRE representan a: Siete estrategias para poner fin a la violencia contra los niños y las niñas, que deben ser consideradas por los gobiernos y organizaciones no gubernamentales que buscan reducir la violencia en la niñez.
3. Principales razones para la violencia de niñas
Con mucha naturalidad, este tipo de violencia tiene causas culturales, algunas costumbres y valores marcan formas discriminatorias para el género femenino. La desigualdad se esconde detrás de testimonios de moral y honra para la mujer. Muchas prácticas que abusan de las niñas se justifican bajo ideas aceptadas sobre como una niña debe ser.
Algunos estereotipos son:
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Puede parecer juego de niños, pero el proceso cognitivo de las niñas a partir de los estereotipos puede tener efectos en su vida adulta.
4. ¿Cómo cada uno puede combatir la violencia contra las niñas?
- Aprendizaje familiar
El aprendizaje también se lo realiza a través del círculo familiar. Es importante mantener una esfera saludable, donde padres y cuidadores practiquen la equidad de género en las diferentes actividades del hogar, demostrando constante amor que genere en las niñas mucha confianza.
De esta forma prevenimos que las niñas adquieran aprendizajes cargados de estereotipos y en un futuro sean víctimas de agresiones.
- Aprendizaje escolar
Es importante que las niñas identifiquen cuáles son los derechos que garantiza su gobierno, con sus instituciones correspondientes y también cuáles son las normativas que a nivel internacional velan por su seguridad. Además, reconocer el tipo de violencia física y psicológica a las que pueden estar expuestas.
Este conocimiento debe ser trasmitido en todos los espacios de conocimiento como: Escuelas, Colegios y Centros de Formación.
- Uso correcto de medios de comunicación y redes sociales
El mundo visual representa ahora una nueva realidad, para muchas niñas el fácil acceso puede ser un riesgo, las redes sociales manejan un gran contenido agresivo para el género femenino como: publicidad, videos y memes; tienen un significado ofensivo para las niñas, es muy importante guiar sobre el análisis del contenido que circula en internet y por la televisión.
- Denunciar a las autoridades
En el caso de presenciar o ser víctima de algún tipo de agresión hacia una niña, es importante denunciarlo de inmediato.
En conclusión
La violencia contra las niñas representa una realidad que ignoramos. El maltrato verbal y físico puede estar presentan en espacios muy cotidianos como el hogar, escuelas y colegios, es muy importante identificar cómo se puede erradicar la agresión, partiendo de elementos como: la educación familiar, la educación escolar, el uso correcto de medios de comunicación y redes sociales y denunciar a las autoridades correspondientes.