¿Por qué toda madre debe tener un tiempo para si misma?

Un hogar representa un trabajo en equipo, existe la creencia que las madres deben dedicar todo su tiempo al cuidado del hogar, atención de hijos e hijas, esto puede representar una gran carga emocional. El estrés puede crear tensión dentro del entorno familiar y al cuidado de los más pequeños.

La familia como equipo

La maternidad no tiene por qué ser solo una actividad de las madres, todas las tareas del hogar como: lavar, cocinar, limpiar y el cuidado de niños y niñas, pueden ser compartidas por todos los miembros de la familia. Actualmente muchas madres y padres dividen su tiempo con las responsabilidades que genera su trabajo y su hogar, y sin el apoyo de todos parecen actividades que nunca terminan. Si no existe un verdadero trabajo en equipo, pueden presentarse emociones que perjudiquen el entorno familiar y desarrollen situaciones de mucha tensión.

Tú salud es lo más importante

El estrés y la preocupación pueden tener efectos negativos. La salud empieza a deteriorarse cuando el exceso de tareas reduce la capacidad de generar anticuerpos que cuidan tu salud. Por ese motivo muchas madres que atraviesan por situaciones preocupantes pueden enfermarse. Algunos de los efectos que expresan el cuerpo son: dolores de cabeza, dolor muscular y algunas molestias estomacales.

Es importante que madres tengan dentro de su día un tiempo para ellas, donde puedan desconectarse de todas las tareas del hogar y el trabajo, podrían considerarlo como parte de su agenda del día tomar unos 30 minutos y realizar ejercicios de respiración y estiramiento, esto es realmente saludable.

Pequeños momentos pueden mantener tu felicidad

El ser madre pone como prioridad a los más pequeños. Recuerdas ¿Qué te gustaba hacer en tus tiempos libres? Quizás para muchas madres era muy divertido ver una película, conversar con alguna amiga, leer o simplemente disfrutar de un momento al aire libre. Todas están de acuerdo que al ser madres siempre hay algo por hacer. Pero es importante identificar aquellas cosas y momentos que hacen sentir bien, esto crea felicidad y puede ayudar a liberar la tensión de un día difícil.

Es importante no sentirse culpable por buscar tiempos libres y momentos de distracción, como cualquier ser humano necesitamos hacer aquello que nos mantenga alegres, caso contrario el exceso de tareas puede generar estados de ánimo que conjugan tristeza y frustración. Una buena forma de encontrar un momento libre es organizando tú día, divide todas las tareas que puedas controlar, especialmente las del hogar.

Todos deben participar en el hogar

El mantener un hogar no solo es responsabilidad de la mamá, los padres también pueden hacer todas las tareas. Es decir, papás encargados de ordenar, cocinar, lavar, planchar y atender al resto de la familia. Además, los más pequeños de casa también pueden aliviar las responsabilidades. Te dejamos algunas recomendaciones sobre ocupaciones que niños y niñas pueden hacer de acuerdo a su edad.

Niños de 2 a 5 años

• Levantar sus juguetes.

Niños de 5 a 7 años

• Ordenar su ropa.
• Ordenar su cuarto.

Niños de 7 a 11 años

• Mantener sus espacios personales limpios y ordenados.
• Ayudar en tareas de limpieza.

Niños de 11 años en adelante

• Ayudar en todas las tareas del hogar.
• Mantener sus espacios y objetos personales limpios y ordenados.

Mantén la calma

Sabemos que la crianza de un hijo o hija, las tareas del hogar y el trabajo pueden ser tareas muy agotadoras, lo más importante es darse un momento para reflexionar sobre la situación, muchas veces nos dejamos llevar por la emoción del momento, especialmente cuando se trata de algo que genera preocupación y estrés. Sin embargo, es importante detenerse un momento y pensar sobre el escenario, si es una situación realmente grave con efectos negativos o si por el contrario es solo un mal momento y tiene una solución fácil.

No esta demás aceptar el apoyo de otros miembros de la familia como hermanos, cuñados, abuelos, entre otros, el dedicar un tiempo para la distracción y atención propia permite mantener un estado calmado que se contagia con todos los miembros dentro de casa.

Equilibrio para el trabajo y el hogar

Una de las situaciones que puede crear más conflicto es el mantener un equilibrio entre el trabajo y el hogar, debido a que ambos representan muchas responsabilidades. Es casi imposible el no llevar las preocupaciones del trabajo a casa y viceversa. Pero sí es posible considerar nuestras emociones a la hora de convivir con nuestros niños y niñas. Muchas preocupaciones y temas pendientes pueden intervenir en nuestra relación con hijos e hijas, dejando sin la suficiente atención o afecto y por el contrario muchas veces ignorando y limitando la convivencia familiar.

Sigue los siguientes consejos:

1. Planifica tareas del hogar con todos los miembros de la familia.
2. Planifica aquellas tareas del trabajo que puedas controlar.
3. Incluye en tu planificación un tiempo libre durante el día.
4. Realiza aquellas cosas que cambian tu estado de ánimo.
5. Busca hábitos sanos de distracción, que contribuyan a tu salud mental y física.

Recordemos que la violencia infantil no solo se refiere al maltrato físico, también representa a otras formas de agresión como la verbal y psicológica, que en algunas ocasiones está presente en madres que mantienen una relación conflictiva con sus hijos e hijas.

En conclusión

Como madres acompañamos el crecimiento de nuestros hijos e hijas. Las múltiples tareas del trabajo y el hogar pueden generar una gran presión, por lo que es importante detenerse un momento para evaluar cuál es el estado físico y emocional, ya que sin darnos cuenta ponemos siempre como prioridad las tareas de casa y la de nuestros hijos e hijas.

Pero vivir de esa manera puede representar graves problemas para la salud física y emocional de una madre, problemas como dolor de cabeza, músculos y molestias estomacales es solo el inicio de un estado de tensión y preocupación, que puede conllevar a otras enfermedades.

Recuerda las tareas del hogar y el cuidado de niños y niñas no solo es labor de la madre, el padre tiene una participación incondicional y con la colaboración de los más jóvenes de casa, se puede desarrollar un verdadero trabajo en equipo.

Por ese motivo es importante que todas las madres tengan un tiempo para sí mismas, brindándose los cuidados y atención que permite mantener un equilibrio mental y emocional. Las madres contagian la alegría y el amor dentro del ambiente familiar, es necesario mantener la calma y brindar el afecto, atención y ternura necesaria para acompañar el crecimiento de sus niños y niñas.