Luego de meses de confinamiento y estudiar desde casa, para muchos niños y niñas, el retorno a las clases presenciales no será una tarea fácil. Regresar a la escuela significa volver a adaptarse y crear una nueva rutina, que ahora incluye convivir con las medidas de bioseguridad en ese espacio.
Han sido tiempos de muchos cambios e incertidumbre. Luego del confinamiento, poco a poco vamos retomando una nueva normalidad y miles de niños y niñas están volviendo a la escuela. Esta situación puede generar diversas reacciones en ellos, por lo que debes estar preparado/a para contenerlos y alentarlos.
Probablemente muchos ya se acostumbraron a estar en casa, en su zona de confort, con tu compañía o la de un ser querido. Sin embargo, no hay que olvidar que los niños necesitan socializar y aprender.
¿Qué hacer si tu niño o niña ya no quiere volver a clases presenciales? Aquí te contamos.
1.Adelántate a los hechos
Para que tu hijo o hija pueda acostumbrarse a la idea, lo mejor es que converses con ellos sobre la eventual vuelta a clase. Asimismo, de las probabilidades que no sea definitivo. Estamos en tiempos de cambio constante; y así como las medidas de seguridad se van flexibilizando, también pueden endurecerse.
2.Refuerza lo positivo
Tal vez tu niño o niña es más introvertido/a y disfruta de estar resguardado en casa, pero también debe descubrir los beneficios de volver a la escuela. Por ejemplo, el reencontrarse con un amiguito con quien solía jugar, disfrutar de las clases de un profesor en particular, poder pasar más tiempo al aire libre, entre otras.
Conversando con él o ella, podrás ayudarle a identificar todas esos aspectos positivos que tenía su lugar de estudio.
3.Transmite seguridad
Para muchos, el miedo al virus sigue latente, pero hay que confiar en las medidas de seguridad. En ese sentido es importante que repasen juntos los resguardos que el niño debe tener en consideración. Por ejemplo, el uso de mascarilla en todo momento y no intercambiarla, el lavado constante de manos, juegos con distanciamiento social, entre otras cosas.
Tal como explican los expertos en este artículo de La Vanguardia, será más fácil afrontar esta situación si se sienten acompañados emocionalmente. A su vez, una medida muy efectiva es dar ejemplo. Si como adultos, afrontamos nuestros miedos y vivimos con seguridad dentro de las limitaciones de la pandemia, se generará un efecto similar en los niños.
4.Haz que la vuelta sea paulatina
Tal como explica este artículo del sitio Sonríe Mamá, no es buena idea hacer que el niño o niña vuelva del golpe al colegio. Lo ideal es que se haga un retorno de manera paulatina. Por ejemplo, adaptar la rutina en casa para que sea lo más parecida posible a la que llevarán al regresar a clases presenciales. En el caso de niños que sufren ansiedad por separación, está la posibilidad de hablar con el establecimiento para coordinar ajustes como empezar con un par de horas al día, para luego ir aumentándolas hasta alcanzar el horario normal.
5.Verifica por qué no quiere volver a clases
Es clave que puedas profundizar respecto a los motivos que hacen que tu hijo o hija no quiera retomar su vida normal. Es muy distinto si el niño no quiere volver porque no le gusta levantarse temprano a que no quiera reintegrarse porque sufre acoso de parte de otros niños. El segundo motivo debe trabajarse con profesionales y la escuela. De ninguna manera esta situación se resolverá presionando al niño.
Pon atención a sus motivos porque probablemente necesita más atención y está dando algunas señales.
Conclusión
Para muchos niños y niñas, sobrellevar la pandemia no ha sido fácil. Nuevamente deben adaptarse a un cambio en su rutina. Lo importante es que cuenten con tu contención y los acompañes en este proceso de cambio. Hay detalles que pueden marcar la diferencia y hacerles más amable este retorno a la normalidad.